{image}http://lh3.googleusercontent.com/-JDBuxr7FY2U/V3KQFGbOi4I/AAAAAAAAUzk/G-5vdJbam48RbpcvZbZ42bEj8j5SYoUlQCCo/s600/6323540.jpg_1718483346.jpg{/image}

El abogado José Humberto Torres, quien lleva el caso del Gerardo Bermúdez, alias ‘Francisco Galán’, y de Carlos Velandia, alias ‘Felipe Torres’, explicó las implicaciones de los procesos judiciales en contra de ambos excombatientes del ELN.

El primero de ellos tiene orden de captura y el segundo ya fue capturado. Las razones de este proceso se remontan al año 2000, cuando hubo un secuestro de más de 70 personas en el kilómetro 18 en el Valle del Cauca. Ese suceso derivó en una investigación de carácter penal, que la Fiscalía llevó a escenarios judiciales, en los cuales fueron condenadas algunas personas como autores materiales del hecho.

Sin embargo, el año pasado, la fiscalía empezó a practicar una tesis en el espacio judicial que consiste en la macroimputabilidad, conforme a lo que han denominado “responsabilidad por línea de mando”.

Eso generó una investigación contra los miembros del Comando Central del ELN (COCE) y, de paso, vinculó a los voceros nacionales para la época, ‘Francisco Velandia’ y ‘Felipe Torres’. En esa investigación los declararon como coautores. En consecuencia, salieron órdenes de captura en su contra. Velandia fue capturado la semana pasada. Actualmente, libra una batalla jurídica en su defensa.

Por su parte, Bermúdez ha hecho un llamado confirmando su voluntad expresa para entregarse a la justicia y así se lo ha hecho saber a la jueza. Por el momento, se están discutiendo las condiciones de seguridad y de reclusión.

“La parte perversa es que la Fiscalía ha querido aplicar esa tesis de línea de mando, que ya aplicó la ley 975 de justicia y paz, para evitarse tener que investigar hechos individuales y la autoría material e individual de muchos de los jefes paramilitares. Ahora se pretende manejar en el caso de ELN y es una tesis perversa, porque no ocurrió lo mismo en el caso de las extrajudiciales”, indicó el abogado Torres.

En los casos judiciales de los mal llamados falsos positivos, inculparon directamente a los mandos medios y rasos del ejército, pero en raras ocasiones subieron hasta los oficiales. De ser así, el hoy presidente Juan Manuel Santos, en esa época Ministro de Defensa, estaría preso.

Estas capturas representan un obstáculo en la coyuntura actual del proceso de negociación con el ELN. La propuesta jurídica desde la jurídica es que se utilice una figura que se usó en el pasado, en el caso de Granda, Sonia u otros miembros de la insurgencia, quienes fueron gestores de paz.

“Francisco y Carlos sí que han sido gestores de paz. Si se logra que el presidente (de la República) tome esa decisión, resolveríamos este asunto por donde hay que resolverlo, que es por la vía política y no por la judicial. No se trata de un Estado que persigue y castiga. Esperamos que el gobierno, con la euforia de paz que hay por estos días, también sea consecuente con la necesidad de que el ELN sea cobijado por la decisión política de la salida negociada y, en este caso, mediante un decreto los designe como gestores de paz. Con lo cual tendrían la posibilidad de que en libertad pudieran ejercer su derecho a la defensa”, expuso.

Mientras eso sucede por fuera, dentro del proceso de paz con el ELN hay un bloqueo. El presidente Santos estableció unos requisitos por fuera de lo concertado en la mesa y restringe la posibilidad real de que se sienten a negociar. A diferencia de las Farc, el ELN tiene una estructura más horizontal. Esto puede implicar que algunos frentes del ELN no hayan visto con buenos ojos los obstáculos del gobierno y puede llevar al traste la salida negociada al conflicto.

Lo último...